1998 Last States Of Nature Ian Simmonds 11 | 12 | 2006 Electronic Future Jazz |
2000 Return To X Ian Simmonds 17 | 10 | 2005 Electronic Abstract |
2009 The Burgenland Dubs Ian Simmonds 04 | 08 | 2014 Electronic Future Jazz |
2015 The Right Side Of Kind Ian Simmonds 22 | 08 | 2016 Electronic Downtempo |
2019 All That's Left Ian Simmonds 30 | 01 | 2023 Electronic Abstract |
2021 The Brunswick Variations Ian Simmonds 02 | 05 | 2022 Electronic Abstract |
2023 Playground (como Juryman) Ian Simmonds 15 | 01 | 2024 Electronic Abstract |
Biografía: En los últimos tiempos la música electrónica ha experimentado una vigorosa vuelta a sus orígenes jazzísticos. La escena actual tiene todos los elementos prestados del género, modernizándolos y adaptándolos a sus necesidades. James Hardway y su Cinematic Orchestra, los brillantes Red Snapper y el británico Ian Simmonds son bichos raros dentro de sus congéneres, pues su música necesita de la experimentación para retroalimentarse. Ian Simmonds, cantante y bajista, formó parte durante la década de los noventa del cuarteto de acid-jazz Sandals, junto a Will Blanchard, John Harris y Derek Delves. Simultáneamente produjo los primeros trabajos del dúo Leftfield y de los Pressure Drop. Tras la disolución del grupo Sandals continuó su carrera en solitario, debutando con Last States Of Nature (1998), un himno al nu-jazz/dark y al estilo downtempo. A ese siguió Return To X (2000), un álbum que navega entre la sorpresa y el encantamiento y en donde su estructura infernal merece estar en una antología del desconsuelo. Más tarde y adoptando el seudónimo de Juryman editó cuatro trabajos más, The Hill (2001), Escape to Where (2002), Wish Road (2013) y Playground (2023). The Burgenland Dubs (2009), The Right Side Of Kind (2015), All That's Left (2019) y The Brunswick Variations (2021), son sus últimos álbumkes con su nombre. Ian Simmonds nos desafía con un jazz turbio y orgánico, misterioso y colosalmente adictivo, en donde la electrónica más contemporánea se nos presenta completamente desnuda. Ritmos rotos, instantes de placer soberano, la música ideal para observar cómo anochece durante los próximos años. © epdlp |