Un padre de la patria (fragmento) "Voy, vuelvo, miro las listas para ver si hay comisión, me preguntan mi opinión unos cuantos periodistas. Se la doy... de referencias, y poniéndome muy serio, «me llaman con gran misterio del salón de conferencias;» les digo «por lo que toca á este asunto, hay varios modos... Adiós.. » y les dejo á todos con la palabra en la boca. Viene el jefe, hay que correr en seguida á saludarle muy cortés, y á preguntarle lo que debemos hacer. Escucho con gran asombro lo que dice... «Sí, va estoy enterado... adiós.» Le doy una palmada en el hombro. Detalle muy principal que parece que no es nada... ¡ A veces una palmada es casi una credencial! " epdlp.com |