Orígenes de la lengua española (fragmento)Gregorio Mayáns
Orígenes de la lengua española (fragmento)

"De los que se impusieron por acaso no se ha de hacer cuenta. Tales son muchos vocablos de germanía, cuyo origen en la mayor parte fue el acaso o el capricho. Llamo germanía al lenguaje rufianesco, propio de rufianes, de gitanos i de otras gentes perdidas que se inventaron un lenguaje para entenderse entre sí i no ser entendidos de los demás; así como en Salamanca se inventó una maldita lengua llamada junciana para que fuese instrumento entre los malos de la comunicación de sus maldades, sin que otros las entendiesen, i en Francia los pordioseros o tunantes usan una lengua que se llama gueux, esto es, de los pobres. Juan Hidalgo, o otro que quiso llamarse así, en el año 1609 publicó en Barcelona muchos Romances de germanía de varios autores y, al fin de dicho librito, que es en duodécimo, imprimió el Vocabulario de germanía, compuesto por él. Este diccionario, como dije, tiene muchas voces inventadas por capricho; otras sólo tienen trocadas las sílabas, como chepo, demias, grito, lepar, lepado, taplo, toba, que quitada la trasposición de letras o sílabas, son en buen romance pecho, medias, trigo, pelar, pelado, plato, bota. Al cual modo de hablar llamamos jerigonza. En cuanto a los demás vocablos de germanía (por decir esto de paso), como éste es una lengua de vagabundos, se compone de los vocablos que han aprendido en varios países i les han parecido más a propósito para formar su algarabía. I así hay unos vocablos que son corrientes en la lengua castellana, como acogerse, acorralar, picar, retirarse, toldar, trotón, trasmontado, tropel. Otros que son anticuados, como gandido por trasmontado; otros metafóricos, como abrazador por alguacil; abrazado por preso; azor por ladrón de presa alta, i a este tenor muchísimos. Otros son árabes, como alcandora, si ya no es que digamos ser voz vascongada. Otros lemosines, como belitre, bochí, formage, gorja, sage, portar. Otros franceses, como gaya por mujer pública, si ya no es que sea voz siriaca. Otros italianos, como gamba por pierna, picol por poco. Otros latinos, como hasta por lanza. I así otros vocablos de otras lenguas. Por cuya causa es menester gran discreción para usar bien de este vocabulario, porque si no se introducirán muchas voces vivísimas o bárbaras, o se usarán metáforas insolentemente atrevidas como las que vemos en muchos autores, que por el camino que se hicieron célebres entre los ignorantes, merecen sumo desprecio en el juicio de los doctos. "


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