A contrapelo (fragmento)Joris Karl Huysmans
A contrapelo (fragmento)

"Nuevamente vive en él el paganismo, dejando oír su última fanfarria orgullosa, elevando a su último gran poeta muy por encima de la inundación de la Cristiandad que en seguida va a sumergir por completo el idioma y a ejercer dominio absoluto y eterno sobre la literatura: con Paulino, el discípulo de Ausonio; con el sacerdote español Juvenco, quien parafrasea los Evangelios en verso; con Victorino, autor de los Machabaei; con Sanctus Burdigalensis, quien en una égloga imitada de Virgilio hace que los pastores Egon y Buculus lamenten las enfermedades que afligen a sus rebaños.
Luego están los santos, toda una serie de santos: Hilario de Poitiers, quien fue campeón de la fe de Nicea y mereció ser llamado el Atanasio de Occidente; Ambrosio, autor de homilías indigestas, un tedioso Cicerón cristiano; Dámaso, fabricante de epigramas lapidarios; Jerónimo, traductor de la Vulgata, y su adversario Vigilancio de Comminges, quien ataca el culto de los santos, el abuso de milagros, la práctica del ayuno y ya predica contra los votos monásticos y el celibato del sacerdocio, utilizando argumentos que serán repetidos en el curso de los siglos.
Por último, en el siglo V aparece Agustín, obispo de Hipona. Demasiado bien lo conocía des Esseintes, puesto que era el más reverenciado de todos los autores eclesiásticos, el fundador de la ortodoxia cristiana, el hombre a quien los católicos piadosos consideran un oráculo, una autoridad soberana. Como consecuencia natural de esto ya nunca jamás abría sus libros, por más que hubiera proclamado su asco por este mundo en sus Confesiones y que, en De civitate Dei, con acompañamiento de piadosos quejidos, hubiera tratado de paliar la aterradora zozobra de su tiempo con sedativas promesas de cosas mejores en la vida de ultratumba. Incluso en sus años mozos, cuando estaba estudiando teología, des Esseintes se había cansado hasta el hastío de los sermones y jeremiadas de Agustín, de sus teorías sobre la gracia y la predestinación y de sus luchas contra las sectas cismáticas. "



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