Raquel Raquel (fragmento)Margaret Laurence
Raquel Raquel (fragmento)

"No sé por qué ruegan a Dios las personas. Yo, si fuera creyente, la última fórmula de Creador que podría imaginar iba a ser uno humanizado. Un ser que podía ser alcanzado mediante las lágrimas, o sobornado con las palabras. Di «por favor», Raquel. Es la expresión mágica.
Mamá...
¡Oh, Dios, por favor! ¡Que me telefonee!
Y la forma en que lo hice todo, aprisa y corriendo. ¿Qué prisa había? A él le divirtió. No me extraña. ¡Zas! Y le eché hacia un lado, me metí como una centella en mis ropas, como si hubiera un auditorio oculto, listo para dar gritos y silbidos con una burla insoportable. Claro que, realmente, pudo haberse presentado alguien. Simplemente porque el sitio no fuera muy frecuentado cuando Nick era un crío, no quiere decir que ahora sea lo mismo. Alguien pudo haber aparecido con la mayor facilidad. Y yo no lo habría soportado. ¿Qué prisa había? ¡Oh, Dios!, al menos podía yo haberlo hecho del modo que lo hice. Aún puedo verme, con ese afán frenético, como una de esas actuaciones del comienzo del cine, todo acelerado cómicamente.
No debo pensar. Y ahora recuerdo. El dijo: «Tendrás cuidado cuando vayas a casa, ¿eh?». No puedo. No tengo los medios. ¿Y mi madre? En alguna parte, desde luego, sin duda, tiene algún artilugio pasado de moda.
La frialdad de mi náusea es como piedra en mis redaños. No. No me romperé los cascos con detalles. No puedo permitírmelo nunca más. ¿Lo habrá conservado mamá? Esta es la única cuestión que importa en estos momentos. Nunca desecha ni tira nada. Pero, ¿por dónde andará la cosa? No puedo empezar a revolver en estos momentos, ello es evidente. No soy capaz de pensar con calma. "



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