Perro blanco (fragmento)Romain Gary
Perro blanco (fragmento)

"El viejo guarda, Bill Tatum, antiguo trapecista del circo Ring Bros, me tranquiliza. El perro está bien, muy bien. Sí, Keys sigue ocupándose de él... El viejo calla, parece querer añadir algo, lo piensa mejor, balbucea unas palabras acerca de la niebla que estropea esta primavera y me entrega las llaves.
Batka me reconoce en seguida. Compruebo aliviado que tiene buen aspecto, que le reluce el pelo y que parece bien alimentado. Pasadas las primeras efusiones, corre hacia la correa, me mira, ladra, me informa de que tiene ganas de pasearse. Me lo llevo a que corra al Griffith’s Park, donde brinca durante una hora. Al regreso me detengo en el viejo Hugh’s Market, que permanece abierto los domingos. He de comprar algunas provisiones. Dejo al perro en el coche.
Hago mis compras aproximadamente en un cuarto de hora. Cuando regreso al parking, con las manos llenas de paquetes, veo que Batka ha salido del coche. Seguramente ha bajado el cristal con el morro. Yo lo había dejado entreabierto para que le entrase aire. Veo también un cochecito de niño. Alguna de las jóvenes mamás que acuden al supermercado lo ha dejado arrimado a la pared. Batka, erguido, con las patas delanteras apoyadas en el cochecito en cuestión, mira al interior del mismo con gran interés. Sonrío, doy unos pasos hacia él y...
No creo haberme asustado tanto en ninguna otra ocasión de mi vida. Me quedo inmóvil, con los paquetes en las manos. Siento que el cuerpo se me hiela...
El bebé que está en el cochecito es un bebé negro. Batka le mira fijamente. Tiene el morro a diez centímetros escasos de la pequeña cara.
Y luego...
Batka me lanza una mirada vivaz, como divertida; luego contempla nuevamente al bebé y se pone a mover la cola.
Mi alivio, mi gratitud son tales que los ojos se me llenan de lágrimas.
Me acerco al perro, le cojo suavemente del collar. Levanta las orejas y sigue moviendo la cola. Veo en sus ojos esa expresión atenta y alegre del perro que ha encontrado un compañero de juegos.
El bebé rebulle y se ríe.
Batka le huele y luego intenta lamerle la carita. "



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