La iglesia, de Simone "Simone, me parece bien. Los ruidos de la noche son dulces cual un cántico cantado por niños; la oscura iglesia semeja un viejo «manor»; las rosas tienen un grave aroma de amor e incienso. Me parece bien, iremos muy serios, lentamente nos saludará la gente que regresa de los prados. Abriré la valla a tu paso y el perro nos seguirá un buen rato con sus ojos tristes. Mientras tú reces, yo soñaré en los hombres . que construyeron estos muros, el campanario, la torre, la pesada nave semejante a una bestia de carga, cargada con el peso de nuestros pecados cotidianos. Cuando regresemos, Simone, será noche cerrada; semejaremos fantasmas bajo los abetos, pensaremos en Dios, en nosotros, en muchas cosas; en el perro que nos aguarda, en las rosas del jardín. " epdlp.com |