Teoría (fragmento) "Todo lo venenoso guarda su veneno inocente e inofensivo, todo lo perjudicial permanece replegado, el mal se queda en su sitio, ocupado en perfeccionarse, hasta que sea llamado precisamente por el bien, que no puede vivir sin el mal. Dios el Unico, tal como lo inventa la Teología, tendría que contener a la vez todos los atributos y por lo tanto sería infinitamente bueno e infinitamente malo. Como estos atributos se anulan recíprocamente, fue necesario atribuir la maldad a un semidiós del mal, quien desde luego podría haber sido al instante aniquilado por Dios Todopoderoso, que sin embargo se desentendió de hacerlo por algún chantaje que se le ocurrió a Satanás, y con el enfrentamiento de los poderes del bien y del mal se ha causado más daño, mucho más, que con haber reconocido desde un principio la inocencia del mundo. El mundo dice: Soy inocente, y continúa lavándose las manecitas en la Vía Láctea con jabón Pilatos, entibiado por el Sol, mundo sin mácula, todos los días nuevecito y acabado de bañar y de besar por Dios, mundo desprevenido, en el que si lloramos es para limpiar los ojos. Los que se sienten culpables derraman su culpa sobre los demás para que les ayuden a llevarla, y como hubo Uno que se atrevió, pretenden que no habrá de faltarles Otro que también se atreva, y para eso han requerido todo un ejército de lavadores de culpa para que el mundo pueda amanecer cada día perdonado, planchado y perfumado con lavanda a los ojos de Dios, a quien hasta hoy sólo le hemos dicho mentiras como a buen padre alcahuete, y si no fuera así lo aborreceríamos y nos iríamos de la casa, posiblemente a fumar marihuana con Satanás. Satanás también es inocente porque él no tiene la culpa de ser Satanás, como no la tengo yo de ser Jaime. El simplemente está prestando un servicio, el servicio que le solicitaron, y lo ha prestado a las mil maravillas, un servicio difícil, ciertamente, de modo que el Todopoderoso le debe estar eternamente agradecido y al final su justicia divina lo premiará con un lugar muy especial en el super-cielo, y lo coronará de gloria a su diestra por los siglos de los siglos, sus cuernecitos enguirnaldados y su cola adornada de rosas porque en el Cielo nada es imposible como no lo ha sido en la Tierra. Con san Adolfo Hitler, san Atila, san Nerón y san Presidente Reagan, san Satanás se reirá eternamente de Centroamérica y de Suramérica y del resto del Tercer Mundo y el Todopoderoso no podrá llamarles la atención porque ya están en el Cielo y si a uno lo regañan también en el Cielo entonces no sería el Cielo. Y la rosa no se marchitará en las manos de Satanás y el ángel bailará con la hiena y es esa suprema armonía lo que se llama Cielo, que antes se llamó Paraíso y estaba en la Tierra, pero lo perdimos por culpa de los hebreos que decidieron ponerse a vender las manzanas sagradas. Han establecido los psicólogos que nunca se realiza acto alguno con intención de obrar el mal. Luego el mal no existe. " epdlp.com |