Tarde de mayo. Nubes venturosas "Tarde de mayo. Nubes venturosas. El olor persuasivo de la hierba en el viento feliz. Lluvia de flores del braquichito. Solos, mi hija y yo, bajo estos árboles, bajo este cielo indescifrable. Ella coge las flores blancas y con un leve polvillo púrpura, y las va esparciendo sobre el césped tranquilo. Los gorriones gorjean, impacientes como un enamorado. Tan sólo diez lentos minutos. Y han sido suficientes para justificar toda una vida. " epdlp.com |