Rumbo a NausicaaDécio Pignatari
Rumbo a Nausicaa

"Llamar suave al tiempo, Lila,
es consentir que es tarde. Mi nuca
mi brazo derecho y el pulso de platina, nunca
las llamó así la tierra, como en diciembre-no
la tierra
que invade las entrañas indefensas, sino
aquella
cuyo destierro es el flujo de la sangre
¡tan floja! allende los poros, en pos
de algún surco más férreo-vivos
por sortilegio de lo insensible, sin más
imperio que pasar los dedos
por ladrillos blancos, como
un hilo de barba o menguante de uña
disueltos en un vaso: alquimia de llanto.
El soplo y la sangre crean, no
resucitan. Los muertos
aborrecen las llamadas de esperanza. Los niños
turban el orden. Los poetas
conmueven el caos, afligen
el vientre de las mujeres. Y decir
suave al sueño, es consentir: Tarde tus senos, Lila,
son muy tarde ahora los senos. "



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