La aldea "A la tarde la calma era perfecta. Mudos los grillos en sus agujeros. En la colina el roble se alzaba negro sobre el rojo cielo. Entonces vine del mar a la aldea pisando radiantes rastrojos Brillaban estrellas y piedras. La luz se encendĂa en las casas. En las calles polvo triturado. EspĂ©rgulas bajo los pies de puerta en puerta, alfombra de verano. " epdlp.com |