El conspirador (fragmento)Mercedes Cabello de Carbonera
El conspirador (fragmento)

"¿Os acordáis de aquel compañero de colegio, confidente de mis atrenzos estudiantiles y amorosos?... pues él había llegado á ser uno de mis entusiastas partidarios; y yo le retornaba su afecto, llamándole amigo intimo, de lo cual él vivía envanecido y satisfecho; y con las intermitencias de las amistades interesadas y calculadoras, fuimos íntimos, unas veces afectuosos y sinceros, otras tibios y desabridos.
Decían de él, que era envidioso (mal crónico de los pequeños) y que no podía soportar el aplauso del ajeno mérito, siempre y cuando en su conciencia, sintiera que ese aplauso era justo; no así cuando se trataba de medianías escasas de todo merecimiento: entonces desplegaba todas sus cualidades oratorias, para ensalzarlo y exagerando su entusiasmo, decía:
— La justicia ante todo; es necesario aplaudir al que tiene méritos reales y verdaderos, para darse uno la satisfacción de fundir á todos los picaros y farsantes.
La lucha por la existencia, esa novísima invención que debiera tener su aplicación tan solo allá en las viejas y gastadas sociedades europeas, y que da pasaporte limpio, cohonestando cuantas perfidias é infidencias sociales puedan cometerse — él la ejercía en provecho propio, sin limitación ni medida.
En su infancia, dice que probó la pobreza suma, aquella rayana en miseria; pero su familia á costa de ímprobos sacrificios, le sostuvo en colegio, hasta que se graduó de Doctor en Leyes.
Más tarde, entró á Congreso en representación de su Provincia, y allí parece que hizo el caldo gordo; pues nada menos que en un negocito ferrocarrilero, vendió su voto en diez mil soles, y este fue el principio de su hoy regular fortuna. "



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