García-Ordóñez

Fernando M. García-Ordóñez


 España | 1922-2015




1958 | 36 años
Escuela-Jardín Guadalaviar
Valencia | España


1967 | 45 años
 Parroquia del Mar
Jávea. Alicante | España


1972 | 50 años
Parador Nacional de Turismo
Salamanca | España


1982 | 60 años
Edificio Lanas Aragón
Valencia | España


Biografía:
  Fernando Martínez García-Ordóñez, arquitecto español nacido en Salas, Asturias. Estudió en la Escuela de Arquitectura de Madrid, donde obtuvo su título en 1955. Discípulo de Miguel Fisac, adquirió una honda influencia de sus modernas propuestas arquitectónicas. En 1957 se traslada a Valencia, donde fija su residencia. En 1960 funda el estudio GO.DB Arquitectos Asociados junto con Juan Mª Dexeus Beatty, al que después se sumarían Julio Bellot, José Manuel Herrero y Francisco Pérez Marzá. El estudio estuvo operativo hasta 1982 y llegó a liderar un equipo de 200 personas, en una estructura profesional y empresarial pionera. Pocos meses después de instalarse en la capital del Turia tuvo lugar la trágica riada de octubre de 1957. Tras la inundación, García-Ordóñez recibe con carácter de urgencia el encargo de confeccionar soluciones definitivas al problema de las riadas. Sus trabajos junto al ingeniero Claudio Gómez Perretta constituyeron los primeros esquemas de lo que vendría a llamarse posteriormente el Plan Sur. En esta época, García-Ordóñez aprovecha su posición de urbanista jefe de la Oficina Técnica para la Ordenación de Valencia para desarrollar un Plan de Coordinación Metropolitana con estudios y propuestas, esfuerzo que quedó reducido en la práctica a la intervención del nuevo cauce y de parte de las infraestructuras viarias propuestas. Personaje polifacético, urbanista por vocación y pionero de la prefabricación, este arquitecto asturiano dejó su huella en Valencia con proyectos como las viviendas de la riada del Cabanyal, el edificio Nuevo Centro, la iglesia de Jávea, propuesta al Premio Nacional de Arquitectura, o el edificio Lanas Aragón, el edificio Bankisur o Les Gavines (El Saler), obras que forman parte del mejor patrimonio arquitectónico valenciano del siglo XX. La Escuela-Jardín Guadalaviar está considerada como su ópera prima en edificación, donde el arquitecto se propuso ensayar los conceptos creativos derivados del “less is more” miesiano, es decir “la función determina la forma”. El edificio, uno de los primeros ejemplos en construcción metálica vista en la ciudad, se convertía en referente de la arquitectura moderna en Valencia. García-Ordóñez realizó grandes viajes tanto por Estados Unidos como por Europa, completando un ciclo de formación envidiable para cualquier profesional de su tiempo, circunstancia que no desaprovechará en el ejercicio de su actividad. Su importante aportación para la consolidación del Movimiento Moderno en la Comunidad Valenciana, su carácter pionero y emprendedor y su abundante legado arquitectónico han hecho de García-Ordóñez una figura de referencia en la arquitectura valenciana de la segunda mitad del siglo XX.  © CTAV



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