1951 | 37 años Calle junto a la luna, La Calle junto a la luna, La D: Román Viñoly Barreto M: Isidro B. Maiztegui |
1952 | 38 años Bestia Debe Morir, La Bestia Debe Morir, La D: Román Viñoly Barreto M: Silvio Bernazza |
1952 | 38 años Esta es mi vida Esta es mi vida D: Román Viñoly Barreto M: Francisco Balaguer Isaac Albéniz |
1953 | 39 años Vampiro negro, El Vampiro negro, El D: Román Viñoly Barreto M: Juan Ehlert |
Otros Films: 1947 ESTRELLITA 1949 CALLE DE LOS SUEÑOS 1949 CON EL SUDOR DE TU FRENTE 1950 FANGIO, EL DEMONIO DE LA PISTA 1950 UNA VIUDA CASI ALEGRE 1953 LA NIÑA DEL GATO 1954 TORMENTA DE ODIOS 1955 CHICO VIOLA NÃO MORREU 1956 EL HOMBRE VIRGEN 1956 HORIZONTES DE PIEDRA 1957 FANTOCHE 1958 LOS DIOSES AJENOS 1958 UN CENTAVO DE MUJER 1959 EL DINERO DE DIOS 1959 REPORTAJE EN EL INFIERNO 1960 LA POTRANCA 1960 TODO EL AÑO ES NAVIDAD 1961 BUENAS NOCHES, MI AMOR 1962 BARCOS DE PAPEL 1963 LA FAMILIA FALCÓN 1965 LA PÉRGOLA DE LAS FLORES 1965 ORDEN DE MATAR 1966 VILLA DELICIA: PLAYA DE ESTACIONAMIENTO, MÚSICA AMBIENTAL Biografía: Director de cine uruguayo nacido en Montevideo, que alternó la comedia con el drama y los temas pasatistas con las más disparatadas tramas. Llegó a Buenos Aires a los 26 años luego de doctorarse en Filosofía y fundar un grupo de teatro en su país natal. Ingresó en la cinematografía argentina como asistente de Alberto de Zavalía, y desde Estrellita (1947), su primer largometraje, su carrera se convirtió en una de las más singulares y desparejas del cine argentino. De su obra destacan, La calle junto a la luna (1951), una enternecedora biografía de Evaristo Carriego, protagonizada por Narciso Ibáñez Menta, La bestia debe morir (1952) y Reportaje en el infierno (1959). En 1953 rodó El vampiro negro. El realizador fue un apasionado por el género de terror y por el expresionismo alemán, y decidió recrear su versión de M. El vampiro de Dusseldorf, de Fritz Lang, su inclaudicable maestro. El resultado fue una excelente muestra de atmósferas alucinadas con algunas de las imágenes más perfectas y poderosas en blanco y negro. Para ésta, la decimoprimera película de la totalidad de su obra, Viñoly Barreto reunió un elenco de primeras figuras de la época y le otorgó a Nathán Pinzón el papel protagónico, al que el actor le puso todo el vigor y el horror necesarios para recrear a ese monstruoso ser sediento de sangre. La trayectoria fílmica de Viñoly Barreto prosiguió hasta 1966, cuando rodó Villa Delicia, playa de estacionamiento, música ambiental, pero su nombre fue cayendo en el olvido y su fallecimiento, ocurrido en 1970, lo convirtió en un director sólo recordado por los apasionados de la historia del séptimo arte autóctono. © Adolfo C. Martínez |