1952 | 44 años Cuarto Hombre, El Kansas City Confidential D: Phil Karlson M: Paul Sawtell |
1954 | 46 años Rumbo al Oeste They Rode West D: Phil Karlson M: Paul Sawtell |
1955 | 47 años Imperio del Terror, El Phenix City Story, The D: Phil Karlson M: Harry Sukman |
1960 | 52 años Del Infierno A La Eternidad Hell to Eternity D: Phil Karlson M: Leith Stevens |
1961 | 53 años Caminos secretos Secret Ways, The D: Phil Karlson M: John Williams |
1966 | 58 años Silenciadores, Los Silencers, The D: Phil Karlson M: Elmer Bernstein |
1969 | 61 años Mansión de los Siete Placeres, La Wrecking Crew, The D: Phil Karlson M: Hugo Montenegro |
1970 | 62 años Nido de Avispas Hornets' Nest D: Phil Karlson M: Ennio Morricone |
Otros Films: 1946 LA DAMA DE JADE 1949 ORQUIDEA RUBIA 1949 THE BIG CAT 1950 SENDEROS DE GUERRA 1951 LA ESPADA DE MONTECRISTO 1952 EL BANDIDO 1952 TRAGICA INFORMACION 1953 CALLE RIVER 53 1954 PLUMA BLANCA 1955 EN UN APRIETO 1955 FIVE AGAINST THE HUSE 1958 EL SALARIO DE LA VIOLENCIA 1960 CUANDO EL HAMPA DICTA SU LEY 1961 VIVIR ES LO QUE IMPORTA 1962 KID GALAHAD 1963 SAFARI EN MALASIA 1967 LA CABALGATA DE LOS MALDITOS 1972 BEN, LA RATA ASESINA 1973 PISANDO FUERTE 1975 FRAMED Biografía: Director de cine estadounidense, cuyo verdadero nombre era Philip N. Karlstein, nacido en Chicago. Tras trabajar como gag-man (escritor de escenas cómicas) para Buster Keaton en los tiempos del mudo, Phil Karlson pasó después por diversos puestos dentro de la industria cinematográfica, ayudante de dirección y productor asociado, hasta que en 1944 debutó detrás de la cámara con el filme de serie B A Wave, a Wac and a Marine. Tras este primer paso, se convirtió en uno de los más fiables y apreciados directores de la Serie B de Hollywood, donde se le considera como el auténtico príncipe de este tipo de filmes. Empezó a ser conocido en los años cincuenta gracias a sus violentos thrillers y westerns y, sobre todo, a la estimable serie de melodramas criminales que realizó entre 1952 y 1955. La primera de ellas, Trágica Información (1952), presenta a Broderick Crawford y a Donna Reed en la violenta historia, basada en una novela del también director Samuel Fuller. Dirige, ese mismo año, El cuarto hombre, un durísimo melodrama con un original e ingenioso guion, donde un excombatiente (John Payne) intenta desenmascarar a sus cómplices en el atraco a un banco. Pero existe un problema: nunca se han visto las caras pues siempre se han encontrado llevando máscaras. Un año después, en 1953, Karlson lleva a cabo un thriller duro y enrevesado, Calle River 99, con de nuevo el actor John Payne en el papel de un inocente que suda sangre para conseguir probar su inocencia. Sin pretensión alguna en su puesta en escena, lo cierto es que Karlson consigue momentos de verdadera tensión y emoción. En 1955 consigue que su obra sea medianamente seguida por algunos, con películas tan apreciables como Tight Spot, en la que Ginger Rogers consigue uno de sus mejores papeles, como la antigua amante de un gánster (Edward G. Robinson) que acepta testificar contra él si le dejan. Tenso y sólido guion, a cargo de William Bowers, y extraordinaria y frenética dirección de Phil Karlson, que conseguirá iguales resultados en sus dos siguientes realizaciones, Five Against the House, con una preciosa Kim Novak, y la magnífica El imperio del terror, basada en una noticia breve real, aparecida en los periódicos. Todas sus películas están marcadas por una violencia, y no siempre psicológica, asfixiante, que muchas veces recuerda a Mann o a Richard Fleisher. Del Infierno a la eternidad (1960), por ejemplo, tiene un planteamiento de intenso melodrama en su primera parte y de hazaña bélica en la segunda. Consigue una exótica atmósfera en Safari en Malasia (1963), y una buena interpretación de Robert Mitchum. Y, curiosamente, consigue su mayor éxito en Estados Unidos, de público y crítica, con su penúltima producción, Pisando fuerte (1973), una modesta película que provocó dos secuelas y diversas imitaciones. De una actividad tranquila pero, a la vez, incansable (desplegó, paralelamente, una importante labor en la televisión, sobre todo, en la serie Los Intocables), Phil Karlson nunca abandonó, pese a haber gozado de cierto status de culto por la crítica norteamericana, la frenética serie B durante las décadas que duró su poco pretenciosa carrera cinematográfica. © Juan Carlos Paredes |