![]() 1705 | 48 años Dios del viento & Dios del trueno Tinta y oro sobre papel. Museo Nacional. Tokio 164.5 x 181.8 cm. | ![]() 1708 | 51 años Ciruelos blancos y rojos Tinta sobre un biombo. MOA Museum of Art. Shizuoka |
![]() 1710 | 53 años El Emperador Go-Mizunoo Tinta sobre seda. Casa Imperial. Tokio 96 x 53.8 cm. | ![]() 1714 | 57 años Yatsuhashi-zu Byobu Tinta sobre madera. MoMA. Nueva York |
Biografía: Nombre artístico del pintor, dibujante, lacador y calígrafo japonés del periodo Edo (1600-1868), considerado como el decorador más importante de los siglos XVII y XVIII de la escuela decorativa Rimpa. Fue hijo de un rico comerciante de tejidos de Kioto que había participado en el círculo artístico del maestro Honami Koetsu, que transmitió a sus hijos el estilo Rimpa del pintor. Kórin despilfarró pronto su herencia: se conoce un episodio de su vida, en el que llegó a un suntuoso almuerzo con la comida envuelta en sencillas hojas de bambú de oro, que arrojó posteriormente al río. Debido a sus problemas económicos empezó a interesarle el arte, colaborando con su hermano Kenzan, un talentoso ceramista y calígrafo. Pintó diferentes diseños decorativos para láminas, kimonos, rollos de pergamino y sobre todo grandes biombos dorados, realizados por su hermano, como por ejemplo los famosos Lirios (Museo Nezu de Arte de Tokio, 1701), en los que unas flores azules y hojas verdes brillan sobre un fondo dorado. Se hizo especialmente famoso por las pinturas de flores, animales y paisajes, que alcanzaron una gracia elegante y estilizada jamás superada en el arte japonés. Todos ellos presentaban llamativas composiciones asimétricas y una yuxtaposición de ricas formas sobre áreas sencillas y vacías. Sus trazos y líneas realizadas con tinta eran a menudo exageradamente delgadas, pero su color fue muy complejo, consiguiendo gradaciones infinitas de iridiscentes degradaciones. A menudo, mezclaba directamente sobre el papel la tinta con la pintura a la aguada, para crear unos espontáneos e inesperados efectos. En 1705 se trasladó a la capital, Edo (actual Tokio), trabajando para los daimyo y diferentes clientes comerciantes. Buscando una libertad creativa, regresó a Kioto en 1711, donde a pesar de la creciente pobreza creó sus obras maestras finales. La obra principal y más tardía de Kórin, el par de biombos de dos hojas Ciruelos rojos y blancos (Museo de Arte Moa, Atami), muestra dos árboles estilizados arqueándose sobre un arroyo dibujado de forma sinuosa; el diseño turbulento del arroyo inspiró directamente la famosa línea latigazo del Art Nouveau de finales del siglo XIX en Europa. © M.E. |