Final de partida (fragmento) "HAMM: Conocí a un loco que creía que había llegado el fin del mundo. Pintaba. Lo apreciaba. Solía ir a visitarle al asilo. Lo cogía de la mano y lo conducía hasta la ventana. ¡Mira! ¡Allí! ¡Cómo crece el trigo! ¡Y allí! ¡Mira! ¡Las velas de los pescadores! ¡Qué belleza! (Pausa.) Se desasía de mi mano y regresaba a su rincón. Asustado. Sólo había visto cenizas. (Pausa.) Sólo él se había salvado. (Pausa.) Olvidado. (Pausa.) Parece que el caso no es… no era tan… tan insólito. CLOV: ¿Un loco? ¿Cuándo? HAMM: Oh, hace mucho, mucho. Todavía no habías nacido. CLOV: ¡Qué tiempos aquéllos! (Pausa. Hamm se quita el solideo.) HAMM: Lo apreciaba. (Pausa. Vuelve a encasquetarse el solideo. Pausa.) Pintaba. CLOV: Hay tantas cosas terribles. HAMM: No, no, ya no hay tantas. (Pausa.) Clov. CLOV: Sí. HAMM: ¿No crees que esto ha durado demasiado? CLOV: Sí. (Pausa.) ¿Qué? HAMM: Es… este… asunto. CLOV: Siempre lo pensé. (Pausa.) ¿Tú, no? HAMM (melancólico): Entonces, es un día como otro cualquiera. CLOV: Mientras dure. (Pausa.) Toda la vida las mismas sandeces. (Pausa.) HAMM: No puedo abandonarte. CLOV: Lo sé. Y no puedes seguirme. (Pausa.) HAMM: Si me abandonas, ¿cómo lo sabré? CLOV (animado): Pues bien, tú tocas el silbato y si no acudo es que te habré abandonado. (Pausa.) HAMM: ¿No te despedirás de mí? CLOV: Oh, creo que no. (Pausa.) HAMM: Pero bien pudiera suceder que te hubieras quedado muerto en la cocina. CLOV: Daría lo mismo. HAMM: Sí, ¿pero cómo sabría yo que simplemente habías muerto en la cocina? CLOV: Bueno… acabaría por apestar. HAMM: Ya apestas ahora. Toda la casa huele a cadáver. CLOV: Todo el universo. HAMM (colérico): ¡Me cago en el universo! (Pausa.) Piensa algo. CLOV: ¿Cómo? HAMM: Una señal, una señal. (Pausa. Colérico.) ¡Una fórmula! CLOV: Ah, bueno. (Empieza a andar de arriba abajo, la mirada baja, las manos a la espalda. Se detiene.) Me duelen las piernas, es increíble. Pronto no podré seguir pensando. HAMM: No podrás abandonarme. (Clov reanuda el paso.) ¿Qué haces? CLOV: Pienso una fórmula. (Anda.) ¡Ah! (Se detiene.) HAMM: ¡Qué pensativo! (Pausa.) ¿Y? CLOV: Aguarda. (Se concentra. No muy convencido.) Sí… (Pausa. Más convencido.) Sí. (Levanta la cabeza.) Ya está. Pongo el despertador. (Pausa.) HAMM: Quizá no tenga un día muy brillante, pero… CLOV: Tocas el silbato. No acudo. Suena el despertador. Estoy lejos. No suena. Estoy muerto. (Pausa.) HAMM: ¿Funciona? (Pausa. Impaciente.) El despertador, ¿funciona? CLOV: ¿Por qué no iba a funcionar? HAMM: Porque ha funcionado demasiado. CLOV: Pero si casi no ha funcionado. HAMM (colérico): ¡Pues por haber funcionado demasiado poco! " epdlp.com |