La forja de un rebelde, La ruta (fragmento)Arturo Barea
La forja de un rebelde, La ruta (fragmento)

"Aquellos muertos que íbamos encontrando, después de días bajo el sol de África que vuelve la carne fresca en vivero de gusanos en dos horas; aquellos cuerpos mutilados, momias cuyos vientres explotaron. Sin ojos o sin lengua, sin testículos, violados con estacas de alambrada, las manos atadas con sus propios intestinos, sin cabeza, sin brazos, sin piernas, serrados en dos. ¡Oh, aquellos muertos!
Seguimos quemando cadáveres en montones rociados de petróleo, seguimos luchando en crestas de cerro, en honduras de barranco, seguimos avanzando más y más, durmiendo en el suelo, devorados de piojos, torturados de sed. Construimos nuevos blocaos, llenando miles de sacos terreros, y levantamos en ellos parapetos. No dormíamos: nos moríamos cada día, para resucitar en la mañana siguiente, y en el intervalo vivíamos a través de pesadillas horrendas. Y olíamos. Nos olíamos unos a otros. Olíamos a muerto, a cadáver putrefacto.
Yo no puedo contar la historia de Melilla de julio de 1921. Estuve allí, pero no sé dónde; en alguna parte, en medio de tiros de fusil, cañonazos, rociadas de ametralladora, sudando, gritando, corriendo, durmiendo sobre piedra o sobre arena, pero sobre todo vomitando sin cesar, oliendo a cadáver, encontrando a cada nuevo paso un nuevo muerto, más horrible que todos los vistos hasta el momento antes.
Un día al amanecer regresamos a la ciudad. Estaba llena de soldados y de gentes que ya no estaban sitiadas. Vivían y reían. Se paraban en la calle para hablarse unos a otros, se sentaban en la sombra a beberse su aperitivo. Los limpiabotas se deslizaban entre la multitud de los cafés. Un aeroplano de plaza trazaba curvas graciosas en el aire. La banda de música tocaba un pasodoble alegre en el paseo. Aquella tarde embarcamos.
Volvimos a Tetuán. Después de pasar dos días alocados por la imagen de las cosas vistas, torturados por un estómago fuera de orden, caí en un desmayo de muerte sobre la mesa del sargento de guardia del cuartel de la Alcazaba. "



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