Medio sol amarillo (fragmento) "El argumenta que Nigeria no conoció lo que era la economía hasta su independencia. El régimen colonial era autoritario, una dictadura inocuamente brutal ideada para beneficiar a Inglaterra. La economía de 1960 estaba basada en el potencial: las materias primas, las personas, la buena voluntad y algo de dinero del negocio maderero que los ingleses se habían reservado para recuperarse económicamente después de la guerra. Y entonces apareció el recién descubierto petróleo. Sin embargo, los nuevos líderes nigerianos pecaron de optimistas y de ambiciosos y creyeron que con sus proyectos de desarrollo obtendrían credibilidad ante la gente; fueron demasiado ingenuos al aceptar las ofertas de explotación extranjeras y se dieron demasiada prisa en imitar a los británicos, en adoptar su actitud de superioridad y en ambicionar mejores hospitales y salarios que durante tanto tiempo habían sido negados a los nigerianos. El aborda los complejos problemas a los que se enfrenta el nuevo país, pero se centra en las masacres de 1966. Los motivos aparentes (la venganza por el «golpe igbo» y la protesta ante un decreto unitario que haría perder puestos en el funcionariado a los norteños) no importaban. Ni tampoco el baile de cifras de muertos: tres mil, diez mil, cincuenta mil. Lo que importaba era que las masacres asustaban y unían a los igbos. Lo que importaba era que las masacres convertirían a antiguos nigerianos en fervientes ciudadanos de Biafra. " epdlp.com |