El plantador de tabaco (fragmento)John Barth
El plantador de tabaco (fragmento)

"Y diciendo esto, mandó al aterrorizado Bertrand a su habitación y él intentó conciliar el sueño. Pero su fantasía estaba demasiado ocupada con diferentes versiones de la inminente confrontación que iba a tener lugar entre su padre y él (versiones cuyos detalles Ebenezer modificaba con el cuidado y desapasionamiento propios del artista) como para permitirle algo distinto de una somnolencia desasosegada.
Lo cierto es que al final no hubo confrontación alguna, pese a que desde Saint Giles hasta donde vivía Ebenezer había sólo un cómodo paseo en coche. Avanzada la tarde del segundo día después de la amenaza de McEvoy, llegó un mensajero a la habitación de Ebenezer (de donde éste, que había abandonado totalmente a Peter Paggen, apenas se había atrevido a salir desde hacía dos días), portando doce libras en metálico y una breve misiva de Andrew:
Hijo mío: Se dice con razón que los hijos son garantía de preocupaciones mas no de satisfacciones. Baste decir que me he enterado de tus inclinaciones viciosas; no quiero mancillarme siendo testigo directo. Te ordeno bajo pena de desheredarte y renegar de ti total y absolutamente que te embarques con destino a Maryland en el buque Poseidón, que zarpará para efectuar la travesía entre Plymouth y Piscataway el día 1 de abril; una vez allí sigue inmediatamente viaje al Puntal de Cooke, para hacerte cargo del gobierno de Malden. Es mi intención residir por vez postrera en las plantaciones, puede que dentro de un año, y para entonces espero encontrar a Malden próspera y a mi hijo regenerado: que sean un legado digno de heredar y un heredero digno de recibirlo. Es tu última oportunidad. "



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