Ivan Vyskocil Visitar o visitar (fragmento) "No lo abre [el sobre] -vale. Lo abre -no vale. [...] Cuando él objetó sobre cómo, no obstante, la servidumbre escucha y habla normalmente, la señora le dijo que ello en nada cambia, que la servidumbre, de todas maneras, es sordomuda, pero precisamente porque es sordomuda, no lo sabe. Y también, ¿cómo iba a saberlo, quién se lo iba a decir, si era semejante a otra sordomuda?  Zabel, cuando dejó la portería del albergue, llevaba consigo la maleta, aunque no supe realmente qué hizo, a dónde se dispuso a ir, si efectivamente abrió o no el sobre en cuestión, que se hallaba entre los invitados en la sala de estar, ya que el servicio no hizo referencia alguno al mismo, si acaso había algo en él, nunca lo supe. Había también una actriz de teatro, la cual provisoriamente adiviné que había llegado a abrir el sobre y que llegó a adquirir fama por una sola razón, un monólogo que versaba sobre el amor materno, al que debía su prestigio internacional y seguir frecuentando visitas, conociendo a la gente imprescindible. Lo intuí por simple previsión, y, aunque nadie escuchara su ilustre monólogo, se adaptaría de algún modo a la historia. No logré comprender gran cosa sobre el amor materno, aunque sentía verdadera fascinación por cómo lo presentaba, tan conmovida y las palabras, al fin y al cabo, se pierden tras los banales acontecimientos. El crimen dejaría de ser enternecedor si se explicara el porqué del mismo o de la muerte. Hay que recuperarse de la afectividad humana gradualmente, poco a poco, como quien sorbiera una copa de coñac. " El Poder de la Palabra epdlp.com