La confusión nacional (fragmento)Ignacio Sánchez Cuenca
La confusión nacional (fragmento)

"Llamemos E al demos original y C al subconjunto de dicho demos. Los miembros de E querrán que el asunto se resuelva por la mayoría en E: si hay una mayoría en contra de la separación el asunto queda resuelto políticamente. El demos E supone que le corresponde a él tomar la decisión. Por eso si se llega a plantear un referéndum, de autodeterminación reclama que en todo caso el sujeto de referéndum sea E y no C. Por el contrario, C no quiere seguir tomando decisiones colectivamente con E y, por eso mismo, no se siente vinculado por las decisiones que el conjunto de E pueda tomar. C pretende llevar a cabo un referéndum de autodeterminación en el que participen todos los miembros de C. Los procedimientos habituales no pueden resolver un conflicto de esta naturaleza. Las reglas democráticas funcionan en la medida en que hay una comunidad que esté de acuerdo en tomar decisiones colectivamente. De ahí que el principio de mayoría resulte inútil si el demos se quiebra. ¿Quién decide quién es miembro del demos? Para que la minoría, en este caso C, acepte el resultado de la regla de mayoría tiene que suceder que C quiera tomar decisiones en común con E, pero el problema es justamente que C quiere tomar decisiones por sí mismo, al margen de lo que decidan las personas que pertenecen a E. La democracia no sirve para decidir quién es el sujeto que tomará las decisiones democráticamente. Se produce una especie de punto ciego de la democracia: cuando esta se vuelve sobre sí misma queda bloqueada. La única forma de avanzar en esta cuestión es a tientas, tratando de inspirarse en valores democráticos de tolerancia y autogobierno, justo lo que, en mi opinión, no se ha hecho en España. "


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