Recuerdos sin retorno (fragmento)Daniel Vázquez Sallés
Recuerdos sin retorno (fragmento)

"Se puede liquidar a un padre con nocturnidad y alevosía, pero si buscaban que hiciera el sano ejercicio de matarte una vez muerto, se equivocaban. No voy a ajusticiarte. Es más, el traje de asesino me queda grande, y matar a un padre suele ser fruto de una autocompasión que trato de evitar en la medida que puedo. Existen tantos francotiradores dispuestos a dispararte apostados al otro lado del río Aqueronte, que yo prefiero hacer de barquero y alejarte de la impaciencia de los ocultos.
(…)
Me voy a poner marxista, y con términos de Groucho Marx te diré que en diez años he pasado de la pobreza a la miseria profesional pasando por ciertos destellos de penuria. El éxito es ya una quimera y lo relativizo para poder soportarme.
Como puedes comprobar, desde el prisma profesional, mis antecedentes penales son triviales. Me gustaría contarte dichas, pero debería especializarme en espeleología para encontrarlas.
También podría mentirte. Inventarme una biografía que rayara lo onírico, pequeños y grandes atajos por los que entrar en falsos paraísos, Shangri-La, Felicity..., pero la mentira es un parche, y para parches, ya tengo la realidad.
(…)
Tengo en la estantería de mi casa una fotografía que tía Julia me regaló el día de tu funeral en Collserola. Estás allí, de pie, con un abrigo cruzado confeccionado por Rosa y una mirada de posguerra que no necesita un pie de foto para contar una realidad sin lujos. Eras flaco como el alambre. Luego tu padre salió de la cárcel, y su obsesión por borrar las huellas del hambre canina acumulada en una celda acondicionada para los condenados a la pena capital te rompió el metabolismo. «¡Come pan, come pan!», te gritaba el abuelo. Nunca culpaste a Evaristo de tus problemas de peso, y jamás le culparás por una compasión agridulce. Con los años, solemos metabolizar todo aquello que duele y evitamos, así, regalarnos a la sociedad como otro asesino en serie. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com