Arte y vida "Los hijos de la carne de los hombres de noche en noche pasan; lloran y ríen y trabajan, y entonces de la vista del hombre escapan. Meditando tamaño destino, la mente se revuelve con un sentido trágico- Recorren el camino asignado tan valientes, se apresuran por lo tanto tan rápido. Los hijos del cerebro del artista la mortalidad eluden. Sobre ellos el Tiempo con su guadaña en vano se agita, hasta que de las horas ya no quedan ecos. En muchos corazones, en tantos llanos, su historia de nuevo abrazan, mientras, jóvenes o viejos, las manos del Futuro para saludarlos se alzan. Como aquí aseguran los oficios de los hombres su presencia a través de los años, así debe perdurar de la Memoria el bronce, con su cúmulo de sonrisas y llantos. Tales vidas en nuestras vidas pueden ver el sol; tales camaradas el Arte puede dar. ¿Son solo sombras los hombres? ¿Somos nos o ellos, quienes viven en realidad? " epdlp.com |