Un Chagall y una hoja de roble "He gastado todos mis ahorros en una litografía de Chagall y la he puesto junto a una hoja de roble que encontré en el camino. Algo a lo que podemos ponerle precio junto a algo a lo que no podemos ponérselo. Algo que es producto de una mano y un corazón humanos y algo que es obra de la naturaleza. El Chagall es hermoso. La hoja de roble es hermosa. Me levanto y preparo té mientras una suave luz vespertina ilumina la mesa. Mirando el Chagall pienso en los días pasados cuando ella regresó junto a mí. Mirando la hoja de roble pienso en la delicadeza de lo creado. Una hoja de roble y un Chagall, ambos preciosos, irreemplazables. El sonido de Ravel en el piano crece. El hoy se transforma en uno con la eternidad Igual que cuerpo y alma se deshacen en uno en el cielo azul tras la ventana. Y estas lágrimas, ¿por quién serán? Y Cuando lleva el verano las cigarras cantan de nuevo. Fuegos artificiales detenidos en mi memoria. Los países distantes se ven borrosos pero el universo está justo delante de tu nariz. Qué bendición que alguien puede morir Dejando tras de sí tan sólo la conjunción “y”. " epdlp.com |