Ritmo circadiano "De vivir en París, podría decir que el paso de los barcos y los botes por el Sena constituye el ritmo circadiano que le es propio a esa ciudad, y en Roma, en motoneta, el ritmo está marcado por los pinos y campanas, en Nápoles serían traghetti o aliscafi que surcan el Tirreno y van a Capri, en Praga son los puentes. Pero escribo en Buenos Aires y no es tan evidente hablar aquí del ritmo circadiano que impone el colectivo. Suena tan falso como quien dice potlach sin haber leído a Marcel Mauss. Misterio que se infla con misterio, infatuación, miseria del misterio. Para todo siempre hay público. " epdlp.com |