La invención del Tercer Mundo (fragmento)Arturo Escobar
La invención del Tercer Mundo (fragmento)

"Después de la guerra el sentimiento antifascista dio paso fácilmente a las cruzadas anticomunistas. El temor anticomunista se convirtió en uno de los argumentos obligatorios en las discusiones sobre el desarrollo. En los años cincuenta se aceptaba comúnmente que si los países pobres no eran rescatados de su pobreza, sucumbirían al comunismo. En mayor o menor grado, la mayoría de los escritos iniciales sobre el desarrollo hace eco de esta preocupación. El compromiso con el desarrollo económico como medio de combatir el comunismo no se restringió a los círculos militares o académicos, encontró un nicho todavía más acogedor en las oficinas gubernamentales de Estados Unidos, en numerosas organizaciones, y entre la ciudadanía norteamericana. El control del comunismo, la aceptación ambivalente de la independencia de las antiguas colonias europeas como concesión para prevenir su caída en el campo soviético, y el permanente acceso a importantes materias primas del Tercer Mundo, de las cuales dependía cada vez más la economía norteamericana, eran parte de la reconceptualización norteamericana sobre el Tercer Mundo en el período posterior a la guerra de Corea.
La “guerra a la pobreza” estaba justificada por factores adicionales, en particular por la urgencia que se confería al “problema de la población”. Comenzaron a proliferar las declaraciones y tomas de posición sobre el tema. En muchos casos se adoptó una forma cruda de empirismo –asumiendo como inevitables las opiniones y recetas malthusianas– aunque economistas y demógrafos hicieron intentos serios de conceptualizar el efecto de los factores demográficos sobre el desarrollo.13 Se formularon modelos y teorías que buscaban relacionar las diversas variables y suministrar una base para la formulación de políticas y programas. Como lo sugería la experiencia de Occidente, se esperaba que las tasas de crecimiento comenzaran a caer a medida que los países se desarrollaran; pero, como advirtieron muchos, los países pobres no podían esperar hasta que este proceso ocurriera y debían agilizar la reducción de la fertilidad por medios más directos. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com