La posibilidad verdadera "Uno y el mismo texto (a pesar de los muchos de tal tipo). Las mismas maniobras de siempre. Y despertar emociones para las mismas maniobras de siempre. Decirle a la primavera: “la primavera”, al aire “aire”. Admirar la piedra (la que cuida una esquina del muro), la piedra protectora en el portal. La de forma de cráneo, la que no tiene boca. Cómo el ciervo padece en las pezuñas el frío. Saber de las orillas del hielo, musgo eterno, uno por uno, un diluvio en el violín. Duro cual piedra, frío como el hielo. Para ese propósito no, para eso yo no habría servido. " epdlp.com |