La marcha de los radicales libresLuis Enrique Belmonte
La marcha de los radicales libres

"Aconsejan ejercicio físico
frutas rojas yerbas verdes
zinc selenio magnesio vitamina C
no carnes rojas no azúcar
no grasas saturadas
no trasnocho no estrés

para intentar revertir los estragos que deja
la marcha de los radicales libres.

Inestables y reactivos
de vida efímera y caótica
los radicales libres oxidan
lo que encuentran a su paso.

Dicen que su volátil presencia obedece
a la incesante búsqueda
de su electrón perdido:
todo radical libre
tiene un alelo extraviado
una parte de sí mismo
que se dio a la fuga

y por eso es que son impares y solitarios
y sus breves enlaces son extremadamente débiles
aunque marchen juntos
en una eterna cadena de robos fugaces.

Si bien es cierto que el tabaco el chorizo
la radiación solar el hierro la gasolina o el alcohol
aceleran la marcha de los radicales libres
tendríamos que decir también
que su marcha es incesante
desde los tiempos remotos ‒hace 3500 millones de años‒
en los que aparecieron los primeros seres
vegetales sobre la tierra.

La marcha de los radicales libres
deja huellas en todo lo que respira y se desgasta:
son la prueba corrosiva de la existencia de Dios
como una llave oxidada en la orilla de la playa
o el leño consumido por el fuego
o la piel arrugada de un tomate. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com