Paul Scheerbart Lesabéndio (fragmento) "El cielo estaba azulado. Y las estrellas eran verdes. Y el sol también estaba verde. Lesabéndio cogió su ventosa y la sujetó firmemente alrededor de la empinada y dentada pared de piedra y luego estiró todo su cuerpo, que en realidad sólo consistía en una pata tubular de goma con una ventosa, a más de cincuenta metros de altura en la atmósfera violeta. Un gran cambio se produjo en el aire con la cabeza de Lesabéndio, su cuero cabelludo gomoso se volvió como un paraguas abierto y luego se cerró lentamente, el rostro se volvió invisible. El cuero cabelludo formó entonces un tubo que estaba abierto por delante, mientras que en su base estaba el rostro, de cuyos ojos sobresalían dos largas estructuras a modo de telescopios con las que Lesabéndio podía ver las estrellas verdes del cielo con excepcional claridad, como si estuviera completamente dentro de ellas. El fiero Biba se tendió en la atmósfera violeta junto al Lesabéndio. Pero mientras el cuerpo de goma de este último permanecía completamente rígido y recto, el de Biba se movía como una brizna de hierba al viento. " El Poder de la Palabra epdlp.com