A Rossini "Aún me parece que en el Cielo santo con desusada gloria en medio de los ángeles estuve a donde de tu canto la constante memoria de nuevo el alma estremecida sube: mas di Rossini, dime si propicio querube, celeste amigo que tu canto inspira, en noche solitaria te enseñó el más ardiente y más sublime himno que sabe su divina lira, en esa pura celestial plegaria; o si tú mismo al cielo suspendido, al angélico coro ¿la escuchaste cantar en harpas de oro, con ella absorto el soberano oído? Por esa hora dichosa, por el celeste olvido del mundo, de mí mismo, de mis males; por el alto placer que mi alma endiosa, a tu valor divino desiguales, estos versos te envío agradecido, ¡Oh delicia y amor de los mortales! " epdlp.com |