Decir contra una dueña (fragmento)Alfonso Alvarez de Villasandino
Decir contra una dueña (fragmento)

"Señora, pues que no puedo
abrevar el mi carajo
en este vuestro lavajo,
por demás es mi denuedo:
he perdido, segunt cuedo,
mi afán e mi trabajo,
si tras el vuestro destajo
non vos arregaço el ruedo.
Señora fermosa e rica,
yo querría recalcar
en ese vuestro alvañar
mi pixa qu’es grande o chica;
como el asno a la borrica
vos querría enamorar,
non vos ver, mas apalpar
yo deseo vuestra crica.
Señora, flor de madroño,
yo querría sin sospecho
tener mi carajo arrecho,
bien metido en vuestro coño.
Por ser señor de Logroño,
non deseo otro provecho
sinon foder coño estrecho
en estío o en otoño.
Señora, por fijo o fija
en vos querría haber,
más vos querría foder
que ser señor de Torija;
si meades por vedija,
fazedmelo entender,
que yo vos faré poner
atanquía en la verija.
Señora, en fin de razones,
yo me ternía por sapo
si el culo non vos atapo
con aquestos mis cojones,
e a los çinco empuxones
non vos remojaré el papo:
non me den limpio trapo
para enxugar los tajones. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com