Las gaviotas "Todas las tardes se reúnen las gaviotas frente a la estación del tren: Allí repasan sus amores. En su libro de memorias dos flores de sándalo: una señala la página de los puentes, otra la de los suicidas. Y también guardan una fotografía del mendigo que, hace tiempo, transportaba los despojos del mercado. Pero su pequeño corazón -que es el de los equilibristas- por nada suspira tanto como por esa lluvia tonta que casi siempre trae el viento, que casi siempre trae el sol. Por nada suspira tanto como por el inacabable (cabalé, cabalá), continuo mudar del cielo y de los días." epdlp.com |