El cáliz febrífugoThéodore Hannon
El cáliz febrífugo

"París, ciudad donde florece la incipiente carne,
cúmulo de provocativas gargantas,
árbol cuyo glorioso fruto conforma
los magníficos y ostentosos senos de las bacantes.

El curvilíneo corsé enseñorea la grieta de la carne
e incita a aprehender sus gemelas bifurcaciones.
Dos ardientes montículos que ascenderías sin vergüenza,
cuerpo loado en gran estima.

A mi alrededor se cierne el calinoso oleaje
de un océano que me aterra y embriaga,
un flujo enteramente níveo que se precipita sobre mí.

La joven de tez pálida y delgada, cáliz febrífugo,
me guía por la senda de mis uñas y mis labios
a través del viático de un delgado y virginal cuerpo. "



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